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Kim Il-sung ordenó a sus médicos prolongarle la vida hasta 120 años
El tratamiento médico concebido para que el líder de Corea del Norte viviera hasta los 120 años tuvo un efecto limitado, ya que esperaba milagros de los doctores sin poner él mucho esfuerzo de su parte.
Kim Il-sung, fundador y 'presidente eterno' de Corea del Norte, ordenó a sus médicos encontrar un método que le permitiera alcanzar la edad de 120 años, informa la que fue su médica personal, Kim So-yeon, en un libro acerca de los más de 30 años que pasó investigando la longevidad, según el diario surcoreano 'Chosun Ilbo', citado por 'The Telegraph'.
La exdoctora fue promovida en 1979 para dirigir el instituto de investigación que el líder norcoreano había ordenado crear dos años antes para que le ayudase a alcanzar esta impresionante edad. Sin embargo, en 1992 Kim So-yeon 'desertó'. Dos años más tarde, Kim Il-sung murió a la edad de 82 años.
Según la doctora, la idea de llegar a 120 años se le ocurrió a Kim Il-sung por primera vez cuando tenía 65 años, y no tardó en convocar a los expertos en medicina más importantes del país para lograr este objetivo.
Se analizaron las propiedades beneficiosas de más de 1.750 hierbas catalogadas en textos sobre medicina oriental. Las plantas que parecían más prometedoras fueron sometidas a experimentos.
El primer remedio que los médicos recetaron a Kim Il-sung fue el de reírse con mayor frecuencia. Cualquier artista que lograra hacer reír al dirigente un mínimo de cinco veces al día era recompensado con el título honorífico de 'actor emérito'.
Sin embargo, los esfuerzos médicos fracasaron, ya que el dictador exigía milagros a los doctores a la vez que él mismo no cuidaba su propia salud.
A partir de los 78 años, Kim Il-sung comenzó a exigir transfusiones de sangre de hombres jóvenes y sanos. La doctora Kim So-yeon señaló que los tratamientos "excesivos" que se le aplicaban tenían efectos secundarios, y no excluye que en realidad agravaran los problemas de salud del dictador, que murió en 1992 después de sufrir un ataque cardiaco.
La exdoctora fue promovida en 1979 para dirigir el instituto de investigación que el líder norcoreano había ordenado crear dos años antes para que le ayudase a alcanzar esta impresionante edad. Sin embargo, en 1992 Kim So-yeon 'desertó'. Dos años más tarde, Kim Il-sung murió a la edad de 82 años.
Según la doctora, la idea de llegar a 120 años se le ocurrió a Kim Il-sung por primera vez cuando tenía 65 años, y no tardó en convocar a los expertos en medicina más importantes del país para lograr este objetivo.
Se analizaron las propiedades beneficiosas de más de 1.750 hierbas catalogadas en textos sobre medicina oriental. Las plantas que parecían más prometedoras fueron sometidas a experimentos.
El primer remedio que los médicos recetaron a Kim Il-sung fue el de reírse con mayor frecuencia. Cualquier artista que lograra hacer reír al dirigente un mínimo de cinco veces al día era recompensado con el título honorífico de 'actor emérito'.
Sin embargo, los esfuerzos médicos fracasaron, ya que el dictador exigía milagros a los doctores a la vez que él mismo no cuidaba su propia salud.
A partir de los 78 años, Kim Il-sung comenzó a exigir transfusiones de sangre de hombres jóvenes y sanos. La doctora Kim So-yeon señaló que los tratamientos "excesivos" que se le aplicaban tenían efectos secundarios, y no excluye que en realidad agravaran los problemas de salud del dictador, que murió en 1992 después de sufrir un ataque cardiaco.
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