El canal internacional
de noticias en español
más visto en el mundo
Opinión

La temeraria normalización de la extrema derecha en España

Publicado:
La temeraria normalización de la extrema derecha en España

El último ciclo electoral en España, comprendido entre el 28 de abril, día en el que se celebraron elecciones generales, y el 26 de mayo, día en el que se celebraron elecciones municipales, autonómicas y europeas, ha supuesto la definitiva legitimación de la extrema derecha en España tras su irrupción en las pasadas elecciones celebradas en diciembre de 2018 en la comunidad autónoma de Andalucía.

El pasado ultra de la derecha española

Antes de continuar se hace necesario precisar que en España la ultraderecha estuvo englobada dentro del Partido Popular hasta el último lustro, momento en el que la derecha se fracturó en tres partidos: Partido Popular a la derecha, Vox situado en la extrema derecha y Ciudadanos ocupando una posición más liberal y, por tanto, más flexible. Pero, pensar que los liberales y los extremistas no tenían representación parlamentaria hasta estos últimos cinco años solo es una ilusión generada por los medios de comunicación españoles con la intención de mostrar apariencia democrática.

Ejemplos de la anterior reflexión habría por centenas, especialmente en los años ochenta y noventa, pero bastaría presentar unos pocos casos para demostrar lo relatado. El primer ejemplo podría ser Arsenio Fernández de Mesa, director de la Guardia Civil en el anterior gobierno del Partido Popular (2011-2016), diputado en las Cortes Generales por el mismo partido entre 1989 y 2012 y Delegado del Gobierno en Galicia entre 2000 y 2004. Arsenio, además del extenso currículum político, también atesora un brillante pasado como conocido ultra violento durante los años ochenta. 

Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
"Con Ciudadanos detuvieron el avance de la izquierda y con Vox pretenden hundirla".

Un segundo caso podría ser Juan Parejo, actual coordinador de Presidencia y Relaciones Institucionales del Gobierno de José Antonio Monago, presidente de Extremadura, el cual luce en una fotografía con el brazo en alto y una camiseta nazi. Un tercer paradigma sería Agustín Condereconocido franquista por muchos diputados, que fue Secretario de Estado para la Defensa (2016-2018), alcalde de Toledo (1995-1999) y diputado y senador desde 1999 hasta 2019. Y un último apunte podría representarlo Santiago Abascal, el actual líder de la ultraderecha española, pues en sus inicios perteneció al Partido Popular. Origen que comparte con el actual líder de Ciudadanos, Albert Rivera.

El enorme beneficio de la aparición de la extrema derecha

El gran beneficiado de la aparición de la extrema derecha ha sido el Establishment, pues han conseguido modificar las coordenadas del juego político. De hecho, esta modificación no fue la primera que hicieron. 

Cuando en 2014 la izquierda española avanzaba con fuerza con un proyecto que giraba sobre coordinadas apolíticas —nueva política contra vieja política— sustentadas en la necesidad de regenerar un país cada vez más azotado por la corrupción del bipartidismo, que entonces suponían el Partido Popular y Partido Socialista, el sistema introdujo una nueva ficha en el tablero: Ciudadanos. La aparición de un partido joven, liberal y moderado en el tablero político nacional obligó a Podemos a cambiar la táctica y volver al tradicional eje de izquierda-derecha, pues la 'nueva política' también englobaba a Ciudadanos y cerca se encontraban de la presidencia.

De la misma manera que el Establishment creó a Ciudadanos para modificar la dinámica de juego cuando parecía que podían perder la partida, en esta ocasión la aparición de Vox está auspiciada para marginar de nuevo a la izquierda y legitimar de nuevo al sistema. Con Ciudadanos detuvieron el avance de la izquierda y con Vox pretenden hundirla. Lo están consiguiendo, pues con la independencia de la extrema derecha, con su discurso estridente y radical, casi bélico, que hasta entonces el Partido Popular guardaba en el armario, el mayor beneficiado ha sido el PSOE

Si bien los bloques considerados izquierda-derecha se mantienen casi inalterados con fuerzas muy parejas, el PSOE ha disparado sus resultados políticos y ha pasado de 85 diputados a 123, mientras Unidas Podemos ha pasado de 71 a 42. Ello se ha debido a que la aparición de la extrema derecha ha movilizado a los votantes de izquierda para impedir el gobierno de la derecha, pero al tratarse de votantes desencantados, tanto del PSOE como de Unidas Podemos, su voto ha sido 'útil' y no 'ideológico'. Y en el escenario de la utilidad, el PSOE ha sido el más favorecido, sobre todo porque los medios de comunicación han trabajado en ese sentido. 

Tal ha sido el trabajo mediático que al día siguiente de las elecciones los votantes progresistas españoles sentían una enorme satisfacción por haber detenido a la extrema derecha, aunque el PSOE esté intentando un pacto con Ciudadanos para evitar gobernar con la izquierda.

Antecedentes históricos

Por otra parte, históricamente, también en España, la extrema derecha siempre ha tenido la misma utilidad. Es una pieza que el sistema utiliza en situaciones de riesgo para provocar que el votante considere aquello que hace tanto le parecía malo como 'lo menos malo'. Sin duda, en la España postfranquista fue el golpe de Estado de 1981 el que permitió la victoria del partido socialista español en 1982. Un partido 'socialista' que introdujo a España en la OTAN, liberalizó y privatizó el sistema público o protegió a la monarquía designada por el propio dictador, Francisco Franco. 

Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
"Nada de lo que suceda en España en los próximos cuatro años quedará al margen de las élites. Los poderosos volvieron a ganar las elecciones".

Casi cuatro décadas después ha sido la aparición de la ultraderecha, esta vez en el terreno político, lo que ha disparado los resultados electorales del PSOE, algo con lo que el propio partido ha jugado durante las elecciones. Y también lo que les ha legitimado. Desde que Vox existe mediáticamente el PSOE parece más demócrata, más social y más progresista. Justo lo que el Establishment pretendía. 

La inestimable colaboración mediática

Pero la extrema derecha no habría podido aparecer sin la inestimable colaboración de los medios de comunicación. En general, los medios de comunicación españoles se caracterizan por su concentración en pocas manos, en manos del poder, del Establishment. No son familias o empresas cuyo futuro dependa del bienestar de la información, de su excelencia, son empresas deficitarias y endeudadas en muchos casos, cuyo futuro depende del bienestar empresarial del país.

Por ello, los medios de comunicación de forma masiva han dado un espacio mediático a Vox de un valor incalculable. Y lo han hecho de tres formas muy efectivas. Una, repudiándolo, atacándolo, pero en prime time; una segunda, defendiéndolo; y una tercera, normalizándolo.

Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
Luis Gonzalo Segura, exteniente del Ejército de Tierra de España.
"Que personas de ideas tan extremistas, en algunos casos auténticamente extravagantes, ocupen espacio político y mediático en España y lo hagan de forma descarada y desvergonzada supone que su mensaje, tan simple y atractivo como falaz, llegará a todos los ciudadanos".

El resultado: ha ganado las elecciones el Establishment con casi 20 millones de votos para PSOE, PP, Ciudadanos y Vox y 270 escaños sobre un total de 350. Nada de lo que suceda en España en los próximos cuatro años quedará al margen de las élites. Los poderosos volvieron a ganar las elecciones.

La temeraria normalización de la extrema derecha

Sin embargo, una cuestión que ni el poder ni los medios de comunicación han tenido en cuenta en su operación por mantener el poder destruyendo a la izquierda, que no solo se ha basado en ensalzar y normalizar a la extrema derecha, sino también en participar de una operación turbia organizada por el ministerio del Interior y la Policía Nacional española, es la enorme temeridad que supone la normalización de la extrema derecha.

Que personas de ideas tan extremistas, en algunos casos auténticamente extravagantes, ocupen espacio político y mediático en España y lo hagan de forma descarada y desvergonzada supone que su mensaje, tan simple y atractivo como falaz, llegará a todos los ciudadanos. No solo eso, sino que se trata de sujetos en muchos casos incontrolables, pues de la misma forma que el teniente coronel Tejero se negó a ceder el control del Congreso de los Diputados durante el golpe de Estado de 1981 a un gobierno de concentración nacional, los extremistas de Vox pueden ser capaces de negarse a más de una de las aspiraciones del Régimen. Por ello el poder les usa, les necesita, pero siempre de forma residual. Solo serán una verdadera opción de gobierno si la otra alternativa es la izquierda. Para entonces ya no habrá solución.

Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de RT.

comentarios
RT en Español en vivo - TELEVISIÓN GRATIS 24/7