Cómo es la vida en Ohura, un pueblo fantasma sin electricidad ni trabajo remunerado

En el pasado esa localidad ubicada a unos 400 kilómetros al norte de Wellington era un centro minero y ganadero, pero desde los años 70 las industrias y la población fueron decreciendo. 

El único recurso con el que cuenta Ohura en la actualidad es su gente, que ha preferido quedarse pese a la ausencia de trabajo y subsidios del Estado.

Ni siquiera la cárcel local está en funcionamiento en este lugar aislado a más de 40 kilómetros de la ciudad más cercana.

El único vínculo de estas personas con el mundo exterior apareció con la llegada del fotógrafo Tony Carter, quien decidió convertir a los habitantes en el objeto de estudio de su proyecto 'Otro mundo: retratos de Ohura'.

Con sus fotos Carter, que llegó a visitar Ohura más de 30 veces durante un año, buscaba contar las historias de los habitantes y su modo de vida apoyándose en sus propios recursos.

Su trabajo muestra lo sinceros y abiertos que siguen siendo pese a que tienen poco, según contó el fotógrafo a 'Daily Mail'.