Hace 65 años, el 8 de mayo, se firmó oficialmente el Acta de capitulación incondicional y total de la Alemania nazi.
La firma del documento fue realizada en el suburbio de Berlin, Karlshorst, ese mismo día pero de 1945, a las 22:43 hora local. El Alto Mando soviético, representado por el famoso mariscal Georgi Zhúkov, recibió la capitulación presentada por el mariscal de campo alemán Wilhelm Keitel.
El acta fue escrita en cuatro idiomas y estipulaba la capitulación sin condiciones de todas las fuerzas alemanas, incluso de las tropas terrestres, marinas y aéreas bajo el mando fascista; el cese de las hostilidades; el desarme completo; el traspaso de todas las armas a los representantes del Mando Supremo del Ejército soviético; y el cumplimiento de todas las órdenes del comando soviético, así como las de la Fuerza Expedicionaria Aliada.
La sesión se cerró a las 00:50 del 9 de mayo de 1945. La noticia sobre este hecho histórico se difundió instantáneamente a todo el mundo.
Las fuerzas del Wehrmacht en el frente soviético-alemán comenzaron rendirse y entregar las armas. Según los datos de Keitel, en aquel momento estaban allí más de un millón y medio de soldados y oficiales fascistas. Del 9 al 17 de mayo, el Ejército Rojo aprehendió a casi 1.391.000 de ellos y además, a 101 generales.
De este modo terminó la Gran Guerra Patria, que duró del 22 de junio de 1941 al 8 de mayo 1945. En la memoria de la humanidad siempre permanecerá ese día de primavera en el que acabó el conficto militar más destructivo y sangriento de la historia.