Pyongyang ha hecho pública su propuesta tras ser oficialmente acusado este viernes por el FBI de estar detrás del ciberataque, que el presidente Obama prometió "responder proporcionalmente".
Corea del Norte asegura no tener nada que ver con el ataque de los 'hackers' contra Sony Pictures, señala la agencia KCNA.
Además, Pyongyang advierte de "graves consecuencias" si Washington se niega a cooperar en la investigación, y sigue acusando a Corea del Norte.