En el contexto de la tensión permanente con la vecina Corea del Norte, el Comando de Tácticas Especiales de Corea del Sur (CTE) es responsable de las operaciones especiales en el país, informa 'Business Insider'. Los soldados del CTE frecuentemente trabajan junto con boinas verdes de EE.UU. y su modus operandi incluye la guerra de guerrillas, los asesinatos y actividades antiterroristas.
Todos los años los integrantes del CTE deben participar en el entrenamiento de guerra de invierno en las montañas de Pyeongchang, al este de Seúl. Las condiciones climáticas invernales en esta zona se caracterizan por temperaturas de hasta seis grados bajo cero e intensas nevadas.
Durante los ejercicios de entrenamiento, los soldados del CTE deben hacer una carrera sin camisa. Los soldados también realizan ejercicios físicos con el torso desnudo.
El objetivo de este duro entrenamiento es que los militares se aclimaten a las condiciones extremas que pueden encontrar en una operación militar.
Este tipo de ejercicios fortalece mentalmente y físicamente a los soldados de las fuerzas especiales.
Además de adaptarse a las condiciones físicas adversas, todos los miembros del CTE deben obtener el cinturón negro de tae kwon do.
Igualmente, los miembros de esta fuerza especial deben perfeccionar sus técnicas de combate y su puntería, para ser altamente efectivos incluso desplazándose en esquíes.
El CTE se compone de siete brigadas de las fuerzas especiales, con un octavo batallón para misiones especiales. Aquí, las fuerzas del CTE toman posición en un río congelado.
Los miembros del CTE entran en sus filas voluntariamente, pero los aspirantes pasan unas rigurosas pruebas antes de ingresar en la brigada de élite.