"Las sanciones vienen y se van, y esto sucedió a lo largo del siglo XX, por cierto, igual ocurrió con sus autores. Pero las relaciones comerciales, los intereses económicos y la reputación se mantienen", señaló Medvédev.
El primer ministro dejó claro que Rusia "cuenta todavía con importantes reservas que garantizan el pago de las deudas del Estado”, y que, en caso de que sea necesario, podrán “ayudar a las empresas en el pago de su deuda externa".
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El primer ministro aseguró además que el Gobierno no renunciará a la libre convertibilidad del rublo.
"Las autoridades no van a renunciar a la libre convertibilidad del rublo. Usted puede, por supuesto, a raíz de los acontecimientos a corto plazo, congelar la tasa de cambio, y hacer que reviva el mercado negro de divisas".
"Pero todo esto significaría una sola cosa: La continuación de la destrucción del mercado", dijo Medvedev durante su participación en el VI Foro Económico Gaidar este miércoles.