Las ruinas de la antigua ciudad de Igarata, que está cerca de Sao Paulo, están reapareciendo, revelando sus viejas estructuras, incluyendo su iglesia, su calle principal, parte de antiguos bancos y una cruz, informa el diario británico 'The Intependent'.
La abandonada urbe llevaba bajo el agua desde 1969, y surge como un vivo testimonio de la terrible sequía en Brasil, la peor en los últimos 80 años.
En 1969 la ciudad fue inundada al hacerse realidad los planes del Gobierno de construir una represa en el cercano río Jaguari.
El resurgimiento de la urbe ha llevado a algunos de sus antiguos residentes a volver al lugar, que no han visto durante más de 45 años.
Cabe destacar que el río Jaguari en Sao Paulo se encuentra 30 metros por debajo de su nivel habitual. La falta de lluvias en Brasil ha dado lugar a una importante escasez de agua en todo el país.
Algunas regiones de Brasil se han visto obligadas a suspender la celebración del carnaval, uno de los acontecimientos más importantes del país.