Los policías que obligaron a la familia de nacionalidad peruana a desalojar el piso, les permitieron sacaron los muebles a la calle, informa 'El Mundo'.
También se informa que la Policía ni siquiera permitió pasar a la abogada de los activistas, que tenía que negociar por teléfono una prórroga imposible, a tres bandas, con la comisión judicial y con el procurador de Bankia.
"Nosotros creemos que la Policía sabe que en este barrio la situación es absolutamente extrema, quizás por eso ha podido suceder esto", afirmó un activista de Stop Desahucios Villaverde.