Lockheed Martin, o cómo construir una aeronave inoperable por 400 mil millones de dólares
¿Qué se puede esperar de un avión de caza desarrollado por la potente industria aeronáutica estadounidense y que encima costó 170 millones de dólares más que el valor estimado? "Mucho", responderían varios, pero no tendrían razón. El caza multifuncional de quinta generación F-35, que costó 400 mil millones, no cumple aún con los requisitos mínimos para este tipo de aeronaves. En pocas palabras: es incapaz de cumplir sus misiones, indica el portal The Fiscal Times.
Siendo el programa de armas más caro de la historia, con un costo unitario estimado en 400 mil millones de dólares, se supone que el F-35, a diferencia de cualquier otro avión de combate, disponiendo de una computadora avanzada, podría identificar un avión enemigo a toda velocidad. Sin embargo, los principales defectos de diseño y las pruebas fallidas, han colocado al programa bajo una seria inspección durante años, con auditores constantemente cuestionando si el caza alguna vez fue capaz de cumplir las misiones para las que ha sido diseñado.
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El año pasado, funcionarios militares criticaron al contratista, Lockheed Martin, por haber cometido todos los errores. Los contratistas afirmaron que habían corregido los defectos y que no volverían a aparecer problemas tan costosos.
Sin embargo, un nuevo informe del Departamento de Defensa, arroja serias dudas sobre el avance del programa. El director del Departamento de Prueba y Evaluación Operacional cita todo, desde el mal funcionamiento del sistema informático hasta defectos en su diseño básico. Y como 'frutilla del postre': la aeronave es vulnerable a incendios del motor, debido a la forma en la que está diseñado.
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Por otro lado, un informe de Military.com reveló otro problema, algo vergonzoso para los ingenieros de Lockheed: la versión de la aeronave desarrollada para el Cuerpo de Infantes de Marina, no puede despegar para cumplir sus misiones.
La "pequeña bomba guiada de diámetro II ni siquiera cabe en la versión del caza desarrollada para la Infantería de Marina", afirma. Además de eso, el software necesario para operar la bomba principal de apoyo aéreo cercano no estará operativo hasta el año 2022, resumieron los inspectores.