"¡Abre la maldita puerta! ¡Por el amor de Dios, abre la puerta!", fueron las últimas palabras del capitán Patrick Sondenheimer al silencioso copiloto para que le dejara regresar a la cabina de mando. Pero sus súplicas fueron en vano.
Los cerca de 10 minutos que estuvo descendiendo el avión probablemente le parecieron eternidad a Sondenheimer, pero no le bastaron para entrar en la cabina.
El capitán, de 34 años, llevaba 10 años realizando vuelos de larga distancia en Lufthansa y su subsidiaria Condor, con más de 6.000 horas de vuelo a sus espaldas, según informó el portal alemán RP Online.
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Un excompañero de trabajo describió a Sondenheimer como "uno de nuestros mejores pilotos". "Era muy de fiar, estoy seguro al 100% de que hizo todo lo posible", comentó.
Please repost 🙏@OBJ_3 Remember Captain Patrick Sonderheimer #Germanwings#Heropic.twitter.com/ieS7sEj6FC— Amy Sedlatschek (@amysuds) 30 Март 2015Muchas personas en las redes sociales han calificado al capitán de héroe, incluso se han creado varios grupos en Facebook para homenajearlo. "Quiero que todos conozcan al héroe. Y en memoria de todos los fallecidos. El cielo ha recibido 150 ángeles. ¡Os amamos!", reza un comentario en uno de los grupos.
An enormous amount of gratitude to Patrick Sondenheimer for trying to stop the crash of Germanwings Flight 9525. You will always be a hero.— Twisted Toonerberg (@TwistedTooner) 29 Март 2015