"El mayor objetivo del interceptor submarino es proteger grupos de submarinos portadores de misiles balísticos y atacar a submarinos hostiles", afirmó Anatoli Shlemov, el jefe del departamento de contratos estatales de la corporación.
Hablando sobre el segundo tipo, el funcionario mencionó que una de las variantes será un "mataportaaviones", además de destruir "objetivos costeros y de superficie".
Los nuevos tipos de submarinos nucleares tendrán un diseño común, diferenciándose en el armamento y objetivos.
Vladímir Dorofeev, el presidente de la oficina de Construcción de Máquinas Navales de San Petersburgo, Malaquita, afirmó el mes pasado que su empresa ya está trabajando en un proyecto de submarinos nucleares de quinta generación.
El proyecto se llevará a cabo tras la construcción de una serie de submarinos de la clase Yasen, que junto con la clase Boréi, también de cuarta generación, representan el resurgimiento de la construcción de submarinos en Rusia.
"Rusia intenta ganar una ventaja asimétrica sobre las fuerzas estadounidenses. Si logra desarrollar una fuerza submarina de tecnología puntera igual que hicieron en la Guerra Fría, creará un problema para los planificadores navales y estrategas de EE.UU. sobre cómo lidiar con la potencial amenaza rusa", comentó Bryan Clark, experto del Centro de Asesoramientos Estratégicos y Presupuestarios, citado por 'The National Interest'.