La viuda de Abu Sayaff, una de las pocas mujeres que accedió al alto mando dentro del grupo terrorista Estado Islámico, ha informado de la existencia y funcionamiento interno de una 'red de mujeres' extremistas después de ser capturada por el Ejército estadounidense.
La mujer fue encontrada –junto a una esclava sexual de la minoría yazidí– en la localidad de Deir Ezzor el pasado mayo durante una redada de fuerzas especiales de EE.UU. Sayaff ha venido cooperando con los funcionarios estadounidenses al revelar nombres y datos de contacto de los altos mandos del EI, según revela el diario británico 'The Daily Mail'.
Su esposo, Abu Sayaff, murió durante la misma redada estadounidense. Sus teléfonos y ordenadores portátiles cayeron en manos de los servicios secretos de EE.UU. La mujer ha admitido que dentro de la organización terrorista tuvo a su cargo el mando de un grupo femenino con misiones de espionaje y captura y venta de esclavas sexuales.
Las mujeres que viven bajo el dominio del EI en Siria e Irak no tienen la posibilidad de alcanzar rangos superiores dentro del grupo terrorista, pero sí están al tanto de las conversaciones secretas y toman parte en operaciones en función del puesto que ocupe su cónyuge.