"Con la aparición de nuevas tecnologías con las que ni soñábamos de niños, no solo se hacen realidad nuevas oportunidades, sino que también surgen amenazas. Últimamente, hemos registrado un aumento de accidentes trágicos entre los aficionados a los 'selfies'. La genta busca nuevos lugares y posturas para sacar fotos, olvidando que se pueden hacer buenas instantáneas en un ambiente más tranquilo", afirma la asistente del ministro del Interior de Rusia, Yelena Alexéyeva.
Para advertir a los ciudadanos rusos del peligro, el Ministerio ha publicado un folleto que reza: "Ningún millón de 'likes' cuesta una vida humana". En el folleto también se recogen varios ejemplos de 'selfies' mortales.
El 4 de julio una joven rusa murió al caer desde un puente cerca del distrito financiero de Moscú mientras trataba de hacerse una fotografía. En San Petersburgo, Ksenia Ignáteva, de 17 años, cayó de un puente cuando intentaba hacerse un selfie en 2014. En mayo de este año una moscovita trató de sacarse una foto posando con una pistola y sufrió una herida mortal en la cabeza.
La adrenalina, el amor a la fotografía y la audacia sin límites la llevaron a la muerte a Xenia Ignatyeva pic.twitter.com/soACpcH1ad— rocato bablot (@rocatour) January 7, 2015La Policía intenta divulgar estos folletos entre la población joven en las universidades, escuelas y eventos populares.