El Centro de Predicción Climática (CPC) del Servicio Meteorológico Nacional estadounidense proyectó que "hay una probabilidad superior al 90% de que el fenómeno de El Niño continúe hasta el invierno del hemisferio norte 2015-2016, y alrededor de un 80% de posibilidades de que va a durar hasta la primavera del 2016", informa Reuters.
Además, indicó que el calentamiento oceánico, la dirección de los vientos y la oscilación de la Tierra, entre otros factores, "reflejan que los efectos de El Niño continuarán y se fortalecerán".
El Niño es "caracterizado por temperaturas superficiales del mar más cálidas de lo normal en el océano Pacífico central cerca de la línea ecuatorial", y puede tener consecuencias devastadoras al provocar fuertes lluvias e inundaciones en América del Sur y temperaturas muy elevadas en Asia y el este de África. Además aumenta las precipitaciones en América del Norte.