Mientras Europa observa cómo "sus instituciones no democráticas" se enfrentan a la tragedia griega y cómo EE.UU. renuncia al acuerdo nuclear con Irán, nace el mundo multipolar, escribe Pepe Escobar para RT.
Según el columnista, esto se hizo evidente después de la Declaración de los BRICS durante la cumbre conjunta de los BRICS y la OCS (La Organización de Cooperación de Shanghái). "La reunión de los líderes de los BRICS, la OCS y la UEE (La Unión Económica Eurasiática) en un solo lugar contribuye a la aparición de la tendencia coordinada de un orden mundial más justo, no dictado por los defensores del excepcionalismo estadounidense", escribe Escobar.
Rusia forma parte de las tres organizaciones y, junto con China, es miembro principal de dos de ellas. Mientras el Pentágono se muestra preocupado por manter su doctrina de "dominio de espectro completo", Rusia y China contrarrestan con un "espectro completo" de cooperación en la política, la economía, las finanzas, la diplomacia y la Defensa, señala el comentarista. Según Escobar, "la fase final de la lucha" será una nueva estructura geopolítica mundial, reforzada por la integración euroasiática. Todo ello pasará por una colaboración de los bancos rusos y chinos, así como el plan para la cooperación en inversión.
Además, según él, es importante que el plan incluya la posibilidad de la creación de una asociación de energía así como de un centro internacional de investigación de energía, menciona Escobar. "El Turkish Stream es otro desafío diplomático y de energía después de que la UE se negase construir el South Stream", añade.
"No es sorprendente que todo esto haya causado pánico entre los defensores del excepcionalismo estadounidense", asegura el columnista señalando que las relaciones entre Grecia y Rusia también pueden ser de importancia estratégica. "De ser así, el flanco oriental de la OTAN corre el riesgo del colapso completo", añade Escobar.