"Somos Chinese Friendly desde finales del año pasado y decidimos serlo porque en los últimos años hemos visto un incremento impresionante de los clientes chinos que se alojan con nosotros y éramos conscientes de que necesitábamos adaptarnos a su cultura, a su forma de ser, a sus necesidades y pensamos que era una buena idea hacerlo cuanto antes", ha asegurado a RT Valeria Knop, responsable de atención al cliente de uno de los establecimientos de la cadena Hoteles Silken.
"Desde hace cuatro años se ha incrementado muchísimo el turismo chino. Es constante. Van entrando, lo que pasa que sí que hay épocas del año como desde noviembre hasta el año chino, que suele caer en febrero, que ahí es cuando más trabajo tenemos", ha añadido Arancha Hernández, camarera del mismo local. "Es la primera vez que hemos adaptado en el bar una carta para un tipo de cliente de una nacionalidad para que ellos se sientan mucho más a gusto aquí con nosotros", ha puntualizado.
A la hora de alojar a clientes chinos los hoteles también tienen en cuenta que son muy supersticiosos. Plantas en rojo suelen ser sus favoritas, para los chinos es el color de la suerte y de la energía. Además, nunca se alojan en habitaciones con el número cuatro.
Al margen de curiosidades y tradiciones, el interés del turismo español por el mercado asiático se apoya sobre todo en las cifras. España ha cerrado 2014 con la llegada de más de 300.000 turistas chinos y se espera que las visitas asciendan al millón a finales de esta década. Aun así, España no es uno de los principales destinos de los viajeros chinos. Hay menos vuelos directos y la tramitación del visado es más lenta que en otros destinos europeos.
"El turista chino es un turista cada vez más especial en el sentido de que tiene cada vez más experiencia. Tenemos que recordar que el turismo chino es un fenómeno reciente. La apertura de China hacia el mundo y la capacidad de los chinos para viajar ha empezado a partir de los años 1990. Entonces aunque el año pasado salieron 104 millones de chinos fuera de China para viajar, sigue siendo una cifra pequeña para un país donde viven casi 1.400 millones de habitantes y donde hay una capacidad de que se muevan casi 600 millones", ha señalado en declaraciones a RT Sonia Fernández, directora de marketing y comunicación de la consultora Chinese Friendly International.
Además del potencial crecimiento está la rentabilidad. El cliente chino es el que más gasta en compras, hasta el 70% del presupuesto de su viaje. Ocho de cada diez aseguran que es su actividad favorita cuando salen al extranjero. "Cada vez tenemos más clientes chinos que efectivamente les gusta nuestro producto y quieren conocer y saber. Sí que es cierto que si no es la primera potencia va a serlo en breve y es un cliente además muy especializado y muy profesional. Con lo cual nos gusta el trato que podemos darles a ellos y dirigirnos a ellos", ha aseverado Laura Márquez, propietaria de un negocio Chinese Friendly.
El cortejo español hacia el turista chino ya ha comenzado. Ahora habrá que esperar a que estos viajeros se dejen querer.