Este módulo de batalla denominado SU-220M fue desarrollado en un principio en Nizhny Nóvgorod por el Instituto de Investigación Burevestnik para ser instalado en buques de combate ligeros, pero finalmente ha sido adaptado a las condiciones de tierra. Tras recibir críticas muy positivas, no solo en Rusia, sino de expertos internacionales, este elemento de artillería ya ha sido catalogado por algunos como el 'asesino de tanques', recuerda 'Rossiiskaya Gazeta'.
Este módulo automático de artillería, que cuenta con un ratio de 300 disparos por minuto, un alcance horizontal de 12 kilómetros, puede cargar municiones que superan un centenar de proyectiles. El SU-220M es capaz de neutralizar todo tipo de objetivos aéreos y, prácticamente, cualquier tipo de vehículos blindados, incluyendo tanques.
Ante contrincantes como el tanque estadounidense Abrams o el alemán Leopard, que cuentan con un blindaje frontal de un metro de grosor, este cañón de calibre 57mm. no alcanzaría a perforarlo, pero su poderosa ráfaga de proyectiles explosivos sencillamente destruiría todos sus dispositivos externos, especialmente los de óptica y las antenas, destrozaría las orugas, y bloquearía la torre.
El gran atractivo de este cañón no reside solo su cadencia de fuego, sino también en su reacción casi instantánea. Esta arma pesada tarda solo un segundo en girar 180 grados, después de lo cual el cañón apunta con precisión sobre el blanco. Sin embargo, no se trata solamente del cañón en sí, sino de una unidad de combate que incorpora una torre deshabitada, varios servos, sistemas de protección, incluyendo sistemas activos y un excelente sistema de control de fuego, que también ha sido desarrollado en Rusia.