Este fue el mensaje del vicealmirante Mike Shoemaker, comandante de las Fuerzas Aéreas Navales, según señaló en un artículo publicado esta semana en la revista digital de Defensa 'DOD Buzz'. En concreto, Shoemaker mencionó el programa UCLASS, que tiene como objetivo el diseño de un avión furtivo no tripulado de largo alcance que sería desplegado desde los portaaviones para ampliar su capacidad de ataque.
"Hoy, más que nunca, los intereses nacionales requieren de la velocidad, la resistencia, la flexibilidad y la naturaleza autónoma del portaviones nuclear de la Marina de Estados Unidos, que se despliega, opera y se prepara para luchar como parte de un Grupo de Ataque de Portaaviones (CSG, por sus siglas en inglés)", argumenta Shoemaker.
Sin embargo, el vicealmirante admite que "después de casi 14 años de operaciones de combate permanentes, las fuerzas de la aviación naval deben restablecerse y recapitalizarse en un esfuerzo por garantizar la disponibilidad en el futuro".
El vicealmirante explicó cómo la Marina estadounidense tiene la intención de transformar sus directrices estratégicas en las próximas décadas para mantener su relevancia.
Después de casi 14 años de operaciones de combate permanentes, las fuerzas de la aviación naval deben restablecerse
Un plan que arranca con los portaaviones de clase Gerald R. Ford, sucesores de los portaaviones de la clase Nimitz. "Un navío verdaderamente innovador, el portaaviones de clase Gerald R. Ford CVN será el núcleo de nuestros futuros grupos de ataque y un habilitador crítico del poder naval de Estados Unidos para el siglo XXI. Este rediseño de la clase Nimitz incorpora avances visionarios de tecnología que resultan en la mejora significativa de la capacidad de combate y una mayor vida útil", agregó el comandante.