El texto, aprobado unánimemente por todos los 15 Estados miembros, incluye cuestiones sobre la transición política y las vías para combatir el terrorismo. Esta ha sido la primera vez en dos años en que el Consejo ha acordado unánimemente emitir una declaración de carácter político sobre Siria.
Concretamente, el documento prevé la creación de cuatro grupos de trabajo. En todos ellos participarán tanto representantes del Gobierno del presidente Bashar al Assad como miembros de la oposición. Cada grupo se concentrará en un tema específico.
Según detalla la agencia de noticias RIA Novosti, uno de los grupos se ocupará de analizar la cuestión de la protección de la población civil; otro, de ajustar el proceso político. El tercero se centrará en la lucha contra el terrorismo y el cuarto, en la restauración del país. Se planea que los grupos empezarán a trabajar este mes de septiembre.
Alexis Lamek, representante permanente adjunto de Francia ante la ONU, ya ha calificado la declaración de "histórica", informa la agencia AFP. Sin embargo, el embajador venezolano ante la ONU, Rafael Ramírez, opina que a pesar de que Caracas votó a favor del documento, el texto tiene varias cláusulas que le inquietan, ya que pueden crear "un precedente muy peligroso".
Según Ramírez, el punto sobre la creación de un órgano gubernamental transicional con poderes ejecutivos completos perjudica la soberanía siria. Opinó, además, que el Consejo de Seguridad debe reconocer que el Gobierno de Bashar al Assad está luchando contra el terrorismo.