Se sabe que las mujeres marroquíes escaparon a Turquía porque temían que el EI las ejecutaría, escribe el rotativo 'Daily Mail'.
Los hombres infectados, en su mayoría combatientes extranjeros, fueron tratados en un hospital controlado por el EI en la ciudad siria de Al Mayadeen y luego puestos en cuarentena.
Los casos de propagación del VIH han causado pánico entre los líderes del grupo terrorista, que ahora planean "asignar ataques suicidas a los militantes que tienen el VIH", señaló una fuente de Al Mayadeen a ARA News.
Según fuentes en el territorio bajo dominio del EI, el virus es corriente en el 'califato' porque un gran número de combatientes "son adictos a las drogas o tienen antecedentes penales", y la enfermedad se propaga rápidamente porque los extremistas frecuentemente intercambian esposas y esclavas sexuales.