El lunes, agentes de la Policía griega, equipados con porras, intentaban controlar a una multitud de 2.500 migrantes que esperaban para poder embarcar en un ferri rumbo a Atenas, proporcionado especialmente para el transporte de los inmigrantes por parte del gobierno griego, informa 'The Telegraph'.
Según el ministro griego de Política Migratoria, Iannis Mouzalas, en Lesbos "la situación está realmente a punto de estallar". En esa isla de 85.000 habitantes, situada al noreste del mar Egeo, cada día llegan más de 2.000 inmigrantes.
Según publicó 'El Mundo', unos 20.000 refugiados acampan por toda la isla de Lesbos. Todos los lugares públicos de Lesbos — el puerto de Mytilene, la playa de Tsamakia, así como jardines y parques — se han convertido en campos de tránsito para los inmigrantes.