La situación de la precandidata demócrata Hillary Clinton se complica a la espera de saber si el FBI decide abrir una investigación criminal por el uso de un servidor de correo electrónico privado durante su etapa como secretaria de Estado.
En un nuevo informe, Charles Ortel, analista e inversor de Wall Street, afirma que los Clinton y sus asociados han estado comprometidos en una "vasta conspiración criminal para defraudar al público en general, enriquecerse y afianzar su influencia política", según el portal político World Net Daily.
Ortel cree que la evidencia merece una investigación penal por parte del FBI, así como por los fiscales generales de cuatro Estados de EE.UU. donde la Fundación Clinton está registrada, mantiene oficinas o ha solicitado "de manera agresiva" donaciones individuales. En concreto, se trata de los Estados de Arkansas, Massachusetts, California y Nueva York.
El analista ha publicado en su página web un nuevo resumen ejecutivo de su 'Primer Informe de la Fundación' sobre su prolongada investigación sobre las operaciones de la fundación de Bill, Hillary y Chelsea Clinton.
"Desde julio de 2002 el peor ejemplo conocido de abusos flagrantes e impunes por parte de una organización benéfica pública con sede en EE.UU. es el registro de declaraciones públicas defectuosas, inexactas, falsas y engañosas hechas por […] la Fundación Clinton, mientras que fideicomisarios, ejecutivos y agentes solicitaron ilegalmente dinero a nivel estatal y nacional y recogieron cerca de 2.000 millones de dólares de donantes que fueron engañados, ya sea voluntaria o involuntariamente", señala Ortel.