En un polígono de la provincia de Oremburgo (distrito federal del Volga), el mandatario pudo conocer directamente los prototipos de las nuevas armas ligeras, incluidas las secretas, del Ejército ruso, informa la cadena NTV.
Putin tuvo ocasión de conversar con soldados, quienes le pidieron que se modernice el equipamiento óptico de los fusiles de los francotiradores.
El presidente también encabezó una reunión de la Comisión para la industria de Defensa en la que se resumieron los resultados preliminares del cumplimiento de los contratos de defensa.
Putin señaló que el 52 por ciento del plan de suministros de armamentos básicos a las Fuerzas Armadas para 2015 ya se ha cumplido.
Asimismo, el presidente subrayó la necesidad de sustituir las importaciones en el complejo industrial militar, haciendo hincapié en diseños ópticos, radioelectrónicos y de aviónica.