En Londres, se ha presentado por primera vez el coche supersónico Bloodhound SSC, desarrollado a lo largo de los últimos ocho años, que en el futuro busca alcanzar la velocidad de 1609 kilómetros por hora, superando de este modo la velocidad de una bala, informa Digital Trends.
Se ha anunciado que el vehículo, que actualmente está completo en un 98 por ciento, intentará establecer un nuevo récord de velocidad el 15 de octubre de 2016, superando la velocidad de 1.287 kilómetros por hora. De conseguirlo, en el Bloodhound se incorporarán nuevas modificaciones para intentar alcanzar el récord de 1609 kilómetros por hora para 2017.
El coche supersónico fue creado gracias a la contribución de más de 350 empresas y universidades de todo el mundo. El Bloodhound SSC dispone de un motor Rolls-Royce que se utiliza en los aviones de combate Eurofighter Typhoon, así como de un motor Jaguar V8. En total, el vehículo tiene una potencia de 133,151 caballos de fuerza.
El coche también está equipado con tres sistemas de frenos diferentes, siete extintores de incendios y 500 sensores. Las ruedas de metal del Bloodhound son capaces de dar 170 vueltas por segundo. La parte exterior del vehículo está hecha principalmente de fibra de carbono e incluye un ala de 198 centímetros de alto que asegura que el coche permanezca estable.