La zona de exclusión de Chernóbil se convierte en un 'paraíso' para la fauna silvestre

En torno a la central nuclear Chernóbil, epicentro en 1986 de la peor catástrofe nuclear de la historia, proliferan los lobos, alces, jabalíes, además de otros animales silvestres, favorecidos por la desaparición del factor humano en la zona, constatan científicos.

La zona boscosa en torno a la central nuclear siniestrada de Chernóbil está superpoblada de alces, ciervos, corzos, jabalíes, lobos y otros animales silvestres, que proliferan en el área de exclusion en torno a la planta pese a tratarse de una zona de alta contaminación radioactiva.

Las poblaciones de mamíferos que habitan la zona de exclusión alrededor de la central no muestran evidencias de haber sido afectadas por la radiación y están creciendo, aunque los estudios anteriores sugerían lo contrario, escribe 'The Independent'

Según los investigadores, la fauna ha prosperado allí debido a la ausencia de la actividad humana. 

"Es muy probable que el número de las especies silvestres de Chernóbil sea mucho mayor que antes del accidente. Esto no significa que la radiación sea buena para la vida silvestre, sino que los efectos de la presencia humana, incluida la caza, la agricultura y la silvicultura, son mucho peores", afirma el profesor Jim Smith de la Universidad de Portsmouth, Reino Unido, que encabezó el estudio.

Tras la catástrofe, más de 116.000 de residentes fueron evacuados de la zona alrededor de la central. Actualmente, dentro del perímetro de seguridad solo opera el personal de las instituciones y empresas de la zona exclusión que salvaguardan los reactores afectados.