En la mañana de este viernes, el huracán Patricia se ha convertido en el más intenso jamás registrado en el Pacífico Oriental y de la cuenca del Atlántico Norte. Si durante la mañana del jueves alcanzaba vientos de más de 130 kilómetros por hora y su presión atmosférica central mínima era de 980 milibares, 24 horas después los vientos ya superaban 320 kilómetros por hora y su presión se redujo a 880 milibares, según indica el portal Mashable.
Para averiguar las causas de tan rápida intensificación, Mashable ha consultado a varios expertos en ciclones tropicales.
La temperatura del agua
El huracán se originó sobre una zona de temperaturas de océano excepcionalmente altas, 1 o 2 grados más que el promedio para este período del año. Además, las condiciones atmosféricas de la zona también eran ideales para que la tormenta se fortaleciera rápido.
Las altas temperaturas del océano se deben en gran medida al fenómeno El Niño, que no solo levantó las temperaturas en el Pacífico oriental tropical sino que también hizo que estas aguas calientes se extendieran a mayor profundidad debajo de la superficie.
Asimismo, antes de la aparición de Patricia, otras tormentas que se produjeron en la misma zona anteriormente han dejado detrás de sí una gran cantidad de agua cálida retenida, indican los científicos.
Condiciones atmosféricas
Según ha indicado el meteorólogo Ryan Maue, el jueves se habían registrado indicaciones de que la tormenta se intensificaría rápidamente. En concreto, se observaron "condiciones de océano y atmósfera optimas/perfectas para una intensificación explosiva". Asimismo, Maue ha comunicado que el hecho de que el huracán Patricia es pequeño y tiene un núcleo interno de tormentas intensas diminuto, lo ayudó a "aumentar la presión dentro de un radio pequeño de viento máximo".
Consideraciones sobre el calentamiento global
En cuanto a la pregunta sobre si el rápido ritmo de intensificación indica cómo el calentamiento global altera las características y el comportamiento de las tormentas, los científicos han afirmado a Mashable que no es tan fácil de responder.
El experto en huracanes Kerry Emanuel ha señalado que la falta de registros constantes de tormentas en el Pacífico oriental utilizando cazadores de huracanes hace difícil determinar si hay una tendencia relacionada con el calentamiento global. A su vez, Maue ha sostenido que los huracanes, a la hora de intensificarse o debilitarse, suelen responder a condiciones más localizadas que a unas tendencias globales.
Mientras tanto, según el investigador de huracanes Gabriel Vecchi, los pronósticos muestran que el calentamiento global va a aumentar las temperaturas de los océanos en el Pacífico tropical oriental, lo cual podría causar más huracanes similares. A su vez, el especialista Tom Knutson ha afirmado a Mashable que de acuerdo con un nuevo estudio, la cuenca del Pacífico noroeste, donde se ubica Patricia, registrará el mayor aumento en la frecuencia de tormentas de categorías 4 y 5 de todo el planeta. No obstante, "puede que solo sea una coincidencia".