Los ataques rusos han elevado el ánimo a los refugiados que viven en un campo cerca de Latakia y que elogian al presidente ruso Vladímir Putin por sus esfuerzos por Siria, informa AP.
"Espero que con la ayuda de los pilotos rusos nuestros militares avancen y combatan a los terroristas, así podremos regresar a nuestras casas", cita la agencia a uno de los desplazados, Ahmad Attan, que antes de caer herido en la guerra era militar del Ejército sirio.
El campo está situado en la provincia de Latakia, poblada mayormente por alauitas, la rama chiita a la que pertenece el presidente sirio Bashar al Assad. La provincia quedó relativamente intacta tras la guerra civil a diferencia de otras zonas sirias.
La base aérea de Jmeimim, donde se despliegan los aviones rusos, también se encuentran en esta provincia.