"Para nuestro país esto significa una gran victoria política y moral, porque esta reelección se da en el marco de presiones, ataques y una campaña permanente contra nuestro país, nuestro sistema político, nuestro Gobierno. Por otra parte significa un reconocimiento del mundo al compromiso de nuestro país con los principios fundamentales de la carta de la ONU y por la diplomacia de la paz que hemos ejercido", enfatizó Ramírez.
Además, Ecuador y Panamá se sumaron al grupo. Los tres países ocuparán a partir del próximo 1 de enero los asientos latinoamericanos en este órgano con sede en Ginebra, Suiza, al que también accederán otros 15 Estados de otras regiones.