"China sigue una política totalmente defensiva en el mar de la China Meridional, pero Occidente no reconoce este hecho". Sin embargo, si el país asiático percibe una amenaza a su soberanía ofrecerá "una respuesta feroz", afirma el columnista Mu Chunshan en 'The Diplomat'.
Así, el periodista sostiene que episodios como la aparición del destructor estadounidense USS Lass patrullando en el mar de la China Meridional cerca de las islas Spratly en disputa no permanecerá sin respuesta por parte de Pekín y estima que "aumenta la probabilidad de que China intensifique los preparativos para un conflicto (con Estados Unidos), debido a que sospecha como nunca sobre el comportamiento de Washington en la zona".
El columnista estima que, con sus maniobras, la Casa Blanca "quiere demostrar que no admite la construcción de las islas artificiales ni las reclamaciones territoriales que podrían generar" y percibe que "el objetivo de EE.UU. es demostrar a sus aliados en Asia que puede controlar las acciones de una superpotencia regional" como China.
Asimismo, para Mu Chunshan esta operación norteamericana "puede ser una reacción a la fuerte resistencia de Rusia en Siria, ya que Moscú ha puesto en jaque las posiciones de EE.UU. en Oriente Medio y Washington utiliza la región de Asia-Pacífico para demostrar su poder".
Además, las reformas llevadas a cabo bajo la dirección del líder Xi Jinping "han mejorado la capacidad de combate de las Fuerzas Armadas de China" y, si EE.UU. no abandona su "viejo hábito" de realizar maniobras cerca de sus aguas territoriales, existe una alta probabilidad de que se produzca una confrontación militar entre ambos países", concluye Mu Chunshan.