Una precisión extraordinaria. Con esta metáfora Konashénkov ha desmentido al coronel estadounidense Steve Warren, que había asegurado que las fuerzas aéreas rusas bombardean las posiciones del Estado Islámico (EI) con municiones no guiadas y que sus ataques no impiden a los terroristas seguir llevando a cabo sus maniobras, informa RIA Novosti.
"Al parecer, después de un bombardeo de aviones estadounidenses los terroristas son hechizados y aplauden al grito de '¡Encore!'. Y entonces llaman a sus colegas de todo el mundo a que vean el espectáculo. Esto explica por qué después de un año de bombardeos de aviones estadounidenses los terroristas del EI lograron hacerse con la mayor parte de Siria", ha ironizado el portavoz del Ministerio ruso de Defensa.
Asimismo, Konashénkov ha criticado a Washington por no mostar, como hace Moscú, imágenes de video de los ataques. "Ya hace una semana le di a entender al coronel Warren que los asuntos militares deben ser tratados de una manera profesional y solo con palabras", ha recordado Konashénkov.