"Los mares internacionales y el espacio aéreo pertenecen a todos y no son dominio de una nación", declaró el almirante Harry Harris, apenas una semana después de que Lassen, un destructor de misiles guiados de EE.UU., pasara cerca de islas artificiales que China está construyendo en las aguas disputadas, lo que sulfuró a Pekín.
"Nuestras fuerzas armadas continuarán volando, navegando y operando cuando y dondequiera lo permita el derecho internacional. Y el mar de la China Meridional no es una excepción", agregó el almirante citado por AFP.
Además, este lunes el Pentágono anunció que pese a las protestas de China y el temor a un agravamiento de la situación en el mar de la China Meridional, los buques de la Marina de EE.UU. llevarán a cabo patrullajes a una distancia de las islas en disputa de 12 millas náuticas [poco más de 22 kilómetros] al menos dos veces al trimestre.
EE.UU. rechaza las reclamaciones territoriales chinas sobre las islas artificiales construidas en la zona, mientras que China califica el envío de un destructor con misiles guiados de acto de provocación.