Blanco invisible: ¿Por qué EE.UU. no fue capaz de atacar antes la economía del EI?
Estos ataques aéreos fueron lanzados no porque los funcionarios estadounidenses fueran adivinos, afirma un artículo publicado en Bloomberg Business, sino porque la administración de Obama encontró un error de cálculo colosal en su estrategia militar en Siria. Y es que la inteligencia estadounidense groseramente había sobrestimado el daño que habían infligido durante los ataques aéreos en los equipos de producción de petróleo de los yihadistas el año pasado y al mismo tiempo subestimó los ingresos petroleros del grupo, que alcanza unos 500 millones de dólares al año, según los datos del Departamento de Tesoro de EE.UU.
El artículo también señala que apenas unas horas antes de que el primer terrorista suicida del Estado Islámico se inmolara fuera del Estadio de Francia el 13 de noviembre, el coronel del Ejército de EE.UU., Steve Warren, admitió en una rueda de prensa que algunos ataques aéreos estadounidenses interrumpieron las operaciones de petróleo de los islamistas por no más de un día o dos.
El gobierno de Obama "había entendido mal el problema [de petróleo] al principio, y luego salvajemente sobrestimó el impacto de lo que hizo", cita Bloomberg a Benjamin Bahney, analista de política internacional en la Rand Corp, un 'think tank' (grupo de expertos de naturaleza investigadora) financiado por el Departamento de Defensa de EE.UU., quien en 2010 ayudó a dirigir un estudio sobre las finanzas del Estado Islámico.
De acuerdo con el experto, la revisión radical de los ingresos petroleros se produjo después de que los funcionarios del Tesoro de EE.UU. recibieron nueva información de inteligencia sobre las operaciones de la organización yihadista en este ámbito tras un raro ataque terrestre llevado a cabo por las fuerzas de operaciones especiales estadounidenses en mayo pasado.
Bahney opina que no está claro cómo EE.UU. pudo fallar tanto en esta cuestión, pero se sospecha que la última serie de ataques aéreos está directamente relacionada con las nuevas cifras. "Tienen que ir tras el petróleo, y hay que hacerlo de una manera seria, pero ellos han comenzado a hacerlo solo ahora", señaló.
El presidente sirio, Bashar al Assad, por su parte, también afirmó que en la lucha contra el Estado Islámico, Rusia, por ejemplo, ha logrado más progresos en dos meses, que la coalición liderada por EE.UU. en un año. Según el mandatario, "antes de que Rusia comenzara a participar hace unos dos meses, había pasado más de un año desde que EE.UU. iniciara su campaña contra los terroristas, si bien el resultado fue que los terroristas ganaron más terreno y reclutaron a más personas en todo el mundo".
Cabe señalar que el Estado Islámico se había metido en el negocio del petróleo mucho antes de que captara la atención del mundo con sus barbaros videos de decapitaciones en verano del 2014. Lo primero que hizo el grupo fue tomar el control de los pasos fronterizos sirios para beneficiarse del contrabando de petróleo, algo que le permitió manejar una red que ha estado operado durante décadas.