Hasta el momento, Rusia mantenía una línea de comunicación directa con el Ministerio de Defensa de Turquía, pero "no ha resultado práctica por culpa de la parte turca", ha explicado el portavoz del Estado Mayor durante una rueda de prensa celebrada en la tarde de este martes.
El ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, por su parte ha anunciado la cancelación de su visita oficial a Turquía prevista para el 25 de noviembre y, además, ha subrayado que el Ministerio de Exteriores ruso aconseja a sus ciudadanos que se abstengan de viajar a Turquía.
"Lo que ahora cabe señalar es el aumento de las amenazas terroristas que vienen de territorio turco", ha declarado Lavrov citado por RIA Novosti. "Y ello es independiente del incidente que ha tenido lugar hoy", ha agregado el ministro al referirse al siniestro del avión militar ruso por parte de Turquía.
El presidente ruso, Vladímir Putin, a su vez subrayó que Rusia siempre ha tratado a Turquía no solo como un vecino, sino como un país amigo. "No sé quién necesita lo que se ha sucedido hoy. Nosotros seguro que no",dijo el líder ruso. "El ataque contra el Su-24 tendrá trágicas consecuencias para las relaciones ruso-turcas", concluyó.
El bombardero táctico ruso Su-24 ha sido derribado en Siria mientras cumplía misiones de ataque contra terroristas. El Ministerio de Defensa ruso ha informado de que ello pudo haber sucedido por un ataque desde tierra y ha insistido en que la aeronave no había cruzado el espacio aérea turco, hecho que se confirma por registradores de su vuelo.