"El incidente en la frontera sirio-turca es un indicio preocupante del estado de caos en el que se encuentra la región. Por este motivo, este tipo de acciones son muy peligrosas. Los misiles y los aviones no son juguetes, no se pueden derribar así como así", dijo Hasán Rohaní citado por la agencia Mehr.
"Los culpables [del derribo del Su-24] deben asumir la responsabilidad de esta provocación. Turquía, nuestro vecino y amigo, debe preocuparse de esto", subrayó el mandatario iraní.
Rohaní agregó que "Rusia y Turquía son dos países amigos para Teherán" y dijo que el Gobierno iraní "exige que estos dos países tomen medidas de seguridad para evitar incidentes similares en el futuro".
El bombardero táctico ruso Su-24 fue derribado durante una misión antiterrorista en Siria el pasado martes por un misil lanzado desde un caza turco F-16. El avión ruso cayó en Siria, a cuatro kilómetros de la frontera turca. Ankara sostiene que el Su-24 violó el espacio aéreo turco, una versión que ha sido desmentida por el Ministerio de Defensa ruso, que esgrimió datos de medios objetivos de control.