La última vez que la FED elevó la tasa de interés base fue en junio de 2006. Desde diciembre de 2008 hasta la fecha se ha mantenido prácticamente en cero, basculando entre 0 y 0,25%.
Entretanto, la FED muestra una leve aceleración del crecimiento económico en el país en los últimos meses. En ese contexto, informa que los gastos de los hogares han crecido "a buen ritmo". También es estable la situación en el sector de la vivienda. El regulador estadounidense también toma nota de una mejora en el mercado laboral.
Sin embargo, sigue siendo débil la dinámica de las exportaciones. La inflación en el país está todavía por debajo del nivel objetivo del 2%, reflejando en parte una disminución de los precios de la energía y de las importaciones en general. "Se espera que a mediano plazo la inflación aumente un 2%", reza el informe.
¿Qué significa esta decisión para el mundo financiero?
Este aumento de la tasa de interés base por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) podría incrementar la volatilidad de los mercados financieros de muchas economías del mundo, desde Europa hasta algunos de los principales países emergentes: Brasil, Turquía, Sudáfrica y Rusia.
En el caso del viejo continente, el Banco Central Europeo sigue una estrategia opuesta a la de la FED: suavizar la política monetaria, en lugar de endurecerla. Según algunos expertos, esta decisión estadounidense podría añadir presión a la recuperación económica de la UE.
Además, algunos países emergentes "podrían experimentar una huída de capitales, que aumentaría la presión sobre la confianza de los inversores", según la agencia internacional de calificación Moody's.
Economistas consultados por el diario 'Financial Times' pronostican que el próximo año la FED podría tomar entre dos y cuatro nuevas decisiones sobre el aumento gradual de la tasa de interés.
La caída de los precios del crudo, una de las primeras consecuencias
Tras el anuncio de la decisión de la FED, se ha registrado una caída de los precios del petróleo en más de un 5%. El precio de la marca Brent ha disminuido en 3,34% hasta 37.44 dólares por barril. El precio del crudo WTI se ha reducido en un 4,81% hasta 35,56 dólares por barril, mientras que anteriormente se ha reducido en más de un 5%, hasta 35.30 dólares por barril.