El mundo se enfrenta a un futuro de escasez de alimentos y migración masiva como consecuencia de la escasez de agua generalizada causada por el calentamiento global, cita el periódico 'The Independent' al secretario general de la Organización Meteorológica Mundial, Michel Jarraud.
De acuerdo con Jarraud, alrededor de 1.600 millones de personas ya viven en zonas catalogadas como de 'escasez de agua', y se prevé que el número llegue a 2.800 millones para el año 2025. El experto señala que la situación seguirá en aumento mientras el planeta siga calentándose. Las regiones más afectadas, por su parte, serán África, Oriente Medio y Asia, aunque algunas partes de Australia, EE.UU., América del Sur y el sur de Europa también son vulnerables.
La falta de agua, por su parte, lleva a la disminución de la producción de cultivos clave: cereales y maíz.
A principios de esta semana la Organización para la Agricultura y la Alimentación de la ONU (FAO) anunció que el sur de África ya se enfrenta a la escasez de alimentos, ya que la sequía, agravada por El Niño causó retrasos en la siembra de cultivos en toda la región. "La presencia de un fuerte episodio de El Niño para los años 2015-2016 plantea serias preocupaciones sobre el impacto en la inseguridad alimentaria", dice el comunicado de alerta de la FAO.
Los expertos predicen que la situación va a desatar una crisis de refugiados, ya que la falta de agua potable y para riego, las pobres cosechas y escases de alimentos harían grandes zonas pobladas inhabitables y cientos de millones de personas se verían obligadas a mudarse.