Irán está preparando el terreno para atraer a los inversores hacia su industria gasística, ante una eventual eliminación total de las sanciones económicas, según informan este domingo medios locales iraníes.
En este sentido, Teherán busca que inversores extranjeros pongan su dinero en el gas iraní, mientras planea convertirse en un jugador importante en el mercado mundial de este hidrocarburo, asegura PressTV.
"Nuestra prioridad es exportar primero gas a nuestros vecinos, ya que los costos de tránsito y de instalación de tuberías serán menores. En primer lugar, trataremos de saturar el mercado regional", señaló el ministro iraní de Petróleo, Bijan Zangeneh, citado por el portal de noticias.
Irán ya ha firmado acuerdos de exportación con países de la región, incluido Irak, que este año comenzará a recibir gas para las centrales eléctricas de Bagdad y Diyala a través de un nuevo gasoducto. La construcción de otro gasoducto que llegará la ciudad de Basora, en el sur de Irak, estará terminada en los próximos dos años, agrega PressTV.
"Con la ejecución de los nuevos proyectos, se espera que la longitud total de los gasoductos de Irán supere los 70.000 kilómetros, lo que la convierte en la tercera red de transferencia después de las de Rusia y EE.UU.", informa el portal.