Garrapatas portadoras de la enfermedad de Lyme han sido detectadas en más de la mitad de los condados estadounidenses, según comunicaron los Centros para el Control y Prevención se Enfermedades del país.
La cantidad de casos de infección con dicha enfermedad en EE.UU. se ha triplicado en los últimos 20 años. Unos 300.000 ciudadanos estadounidenses se ven contagiados con la bacteria cada año, según la revista 'Science'.
Esta enfermedad se encuentra en el hemisferio norte y es causada por una bacteria que se propaga a través de las picaduras de las garrapatas del ciervo.
Causa síntomas como fiebre, dolor de cabeza, fatiga y una erupción típica de la piel llamada 'eritema migrans'.
Si no se trata, la infección puede propagarse de la parte del cuerpo picada a otras, incluso el corazón y el sistema nervioso.
Para no infectarse hay que evitar lugares donde haya garrapatas o llevar ropa que cubra todo el cuerpo y usar repelente.
Si una garrapata se 'encariña' con usted, recuerde que necesita estar adherida entre 36 y 48 horas o más antes de que la bacteria pueda transmitirse, por lo que hay que detectar y eliminar los insectos antes de contraer la enfermedad.
Cuando la enfermedad se detecta a tiempo, puede ser curada con antibióticos.