Pionyang asegura disponer de tecnología que le permite regular la potencia de detonación de la bomba de hidrógeno para obtener el rendimiento que considere necesario, informa la agencia Yonhap.
"Si la extensión de nuestro territorio fuera tan grande como la de EE.UU., habríamos probado la detonación de una bomba de hidrógeno que superaría decenas o centenares de veces la potencia de sus bombas", recoge el portal surcoreano.
A su vez, especialistas y expertos surcoreanos y estadounidenses han mostrado sus discrepancias respecto al hecho de que Corea del Norte haya realizado la prueba de una bomba de hidrógeno, puesto que la potencia de la explosión de la última norcoreana fue de solo seis kilotones, a diferencia de la potencia de las bombas de hidrógeno que normalmente oscila entre los diez y cien kilotones.
El pasado día 6 de enero, Corea del Norte realizó su prueba de dicha bomba. Entonces el Consejo de Seguridad de la ONU sentenció que Pionyang supone una amenaza para la paz y seguridad internacional.