En su intervención ante la Conferencia de Seguridad internacional en Múnich, el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, ha advertido del riesgo de una operación terrestre en Siria. Para llevar a efecto la resolución de la ONU sobre la normalización del problema de Siria, la clave será la cooperación en materia de inteligencia entre los militares rusos y de EE.UU., opinó.
En el marco del 'califato global' la discusiones no son pertinentes
"Por desgracia, los terroristas logran extender su influencia debido a que Rusia y Occidente no pueden unirse", agregó. Si la situación en Siria no se normaliza, el terrorismo puede convertirse en "un método de gestión casi estatal", advirtió.
"Sin una normalización de la situación en Siria y otras zona de tensión, el terrorismo se convertirá en un nuevo tipo de guerra", dijo.
El Estado Islámico debe de estar agradecido a Occidente
"El Estado Islámico debe de estar agradecido a los líderes de varios países occidentales que cortaron la cooperación en materia de Inteligencia", dijo el primer ministro ruso.
El primer ministro ruso advirtió a Occidente contra "la doctrina de contención de Rusia" e hizo un llamamiento a estos países para que unan sus fuerzas con Rusia para resolver los problemas ya existentes.
"La doctrina de contención de Rusia es aplicada hoy por Occidente de manera muy activa. La amenaza de este enfoque radica en que en 10 o en 20 años nos veremos obligados a abarcar los mismas temas, si es que todavía hay alguien para discutirlos".
"En el marco del 'califato global' la discusiones no son pertinentes", resaltó.
El primer ministro ruso se mostró esperanzado ante la posibilidad de que Rusia y los países occidentales aúnen esfuerzos para afrontar los desafíos urgentes y sobre la imposición de un alto el fuego en Siria tras la Conferencia de Seguridad de Múnich.