Las Fuerzas Armadas turcas han vuelto a bombardear posiciones de las fuerzas de autodefensa kurdas en el norte de Siria, ha declarado este lunes el portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores turco, Tanju Bilgiç, informa RIA Novosti.
"Esta mañana ha habido un ataque a nuestro paso fronterizo en la provincia de Hatay. Según los datos operativos, los disparos se realizaron desde posiciones del PYD (siglas del partido kurdo sirio Unión Democrática). Por nuestra parte, se abrió fuego de respuesta", ha indicado Bilgiç.
Los misiles lanzados por Turquía han alcanzado un hospital infantil, una escuela y otros lugares de la ciudad siria de Azaz, de acuerdo con un médico y dos residentes citados por Reuters.
Tres días de ataques consecutivos
Este domingo Turquía lanzó otro ataque contra los territorios controlados por los kurdos en Siria. En concreto, sobre los asentamientos de Marinin y Anab, situados en los alrededores de la ciudad de Afrin (cerca de la frontera turca).
Además, este sábado los militares turcos atacaron objetivos del Partido de la Unión Democrática (PYD) cerca de la ciudad de Azaz, en la provincia de Alepo, así como objetivos del Ejército sirio en la región turca de Hatay, en dos hechos separados alegando que se trataba de ataques de respuesta. Además, antes de estos ataques se reportó que la artillería turca había atacado zonas de la provincia de Alepo, en el noroeste de Siria, controladas por las fuerzas kurdas. En concreto, el ataque fue dirigido contra la base aérea estratégica de Minnigh, reconquistada por los kurdos el miércoles.
Los ataques se registraron poco después de que el primer ministro Ahmet Davutoglu anunciara la semana pasada que Ankara podía emprender una acción militar contra el PYD. "Si es necesario podemos tomar las mismas medidas en Siria que ya tomamos en Irak y Qandil", señaló el jefe del Gobierno en un discurso televisado refiriéndose a los bombardeos de Turquía contra objetivos del PKK en su feudo de las montañas de Qandil (norte de Irak) el año pasado.