Autoridades de la provincia de Guizhou, en el sudoeste de China, anunciaron la evacuación de 9.110 personas como parte del proceso de puesta en funcionamiento del radiotelescopio más grande del mundo, que estaría terminado en septiembre próximo.
La reubicación tiene como objetivo evitar que los pobladores sufran los efectos de las ondas electromagnéticas del Telescopio de Apertura Esférica (FAST por sus siglas en inglés), por lo que serán trasladados a Pingtan y Luodian, distantes a cinco kilómetros, donde estarán a salvo de las ondas electromagnéticas, publicó la agencia de noticias Xinhua.
A cambio del realojo, cada uno de ellos recibirá una compensación de 12.000 yuanes (unos 1.830 dólares), mientras que los miembros de las minorías étnicas con problemas de vivienda obtendrán una ayuda de 10.000 yuanes (unos 1.500 dólares).
El radiotelescopio tiene la forma de un plato del tamaño de unos 30 campos de fútbol, con una apertura de 500 metros, con lo que superará al Observatorio de Arecibo, en Puerto Rico, que alcanza los 305 metros. Además, está formado por 4.450 paneles móviles triangulares que serán los encargados de recibir las señales de radio provenientes del espacio.
Este nuevo instrumento, cuyo proyecto comenzó en marzo de 2011 y necesitó una inversión de 185.000 millones de dólares, les permitirá a los investigadores chinos obtener importante información sobre el espacio, e incluso en la búsqueda de vida extraterrestre fuera de esta galaxia.