Uno de los miles de documentos secretos filtrados por WikiLeaks a mediados del año pasado sugiere que Arabia Saudita estaba preocupada por la postura de Rusia ante los acontecimientos en Siria y que Riad aparentemente planeaba presionar a Moscú para que cambiase su política en territorio sirio a través de la Organización Internacional para la Cooperación Islámica (OIC, por sus siglas en inglés), informa Levant Report.
Además, el informe, recientemente traducido al inglés y fechado en 2012, muestra cómo el reino saudita insta a no referirse ni ofender a ningún líder político ruso personalmente y dirige a sus medios de comunicación a "no oponerse a las figuras rusas y evitar insultarlas" en aquel momento.
"Si le agrada a su majestad, apoyo la idea de entrar en un diálogo profundo con Rusia con respecto a su posición en relación a Siria, celebrar la Segunda Conferencia Estratégica en Moscú, trabajar para centrar la discusión en la cuestión de Siria y ejercer cualquier presión posible para disuadir su posición actual", reza el informe del Ministerio de Exteriores saudita.
"Del mismo modo, veo una oportunidad para invitar al máximo responsable del Comité de Relaciones Internacionales de la Duma a visitar el reino. Dado que es mejor permanecer en comunicación con Rusia y dirigir los medios de comunicación para que no se opongan a las figuras rusas y evitar insultarlas, de modo que ningún daño pueda afectar a los intereses del reino, es posible que el nuevo presidente de Rusia cambie la política rusa hacia los países árabes a mejor", prosigue el documento interno del régimen saudita.
La filtración sostiene que su posición actual, "que es criticar la política rusa hacia Siria y sus posiciones contrarias a nuestros principios declarados", no sufre cambios. "También es ventajoso aumentar la presión sobre los rusos mediante el fomento de la Organización de los Estados Islámicos para ejercer algún tipo de presión utilizando con fuerza la opinión pública islámica, ya que Rusia teme la dimensión islámica más que la dimensión árabe", añade.
"En caso de que el régimen sirio sea capaz de superar su actual crisis en cualquier forma o modalidad, el objetivo principal que se llevará a cabo es vengarse de los países que se levantaron contra él, con el reino y algunos de los países del Golfo en la parte superior de la lista", sentencia el memorando, que insta a Riad a hacer todo lo posible para derribar al régimen mismo, ya que EE.UU. y la comunidad internacional, sugiere, no tienen ningún deseo de "actuar con decisión".
En verano de 2015, WikiLeaks sacó a la luz más de medio millón de cables y otros documentos del Ministerio de Asuntos Exteriores saudita que contenían comunicaciones secretas pertenecientes a varias Embajadas sauditas de todo el mundo. Al parecer, las filtraciones también contienen informes secretos de varias instituciones sauditas, como el Ministerio del Interior o los servicios de inteligencia.