La Fuerza Aérea de Estados Unidos se encuentra en el nivel más bajo de su historia: su flota disminuyó significativamente, sus aviones cada vez son más ruinosos, y los pilotos estadounidenses no están preparados para operaciones a gran escala. Así describe la actual situación la revista norteamericana 'The National Interest'.
Washington, por su parte, reconoce la situación. "Actualmente, en total tenemos solo 55 escuadrones de combate, la edad promedio de una aeronave estadounidense ha alcanzado los 27 años y menos de un 50% de las fuerzas de combate están listas para llevar a cabo operaciones a gran escala", declaró el general David Goldfein, jefe adjunto del Estado Mayor de la Fuerza Aérea de EE.UU. Entre las razones, por las cuales es necesario que el Gobierno estadounidense preste atención a los problemas de la Fuerza Aérea del país, Goldfein destacó la reactivación del poderío militar chino, la operación antiterrorista rusa en Siria, el retorno de Irán a la arena política mundial y las ambiciones de Corea del Norte y el Estado Islámico.
Además, el general subrayó su "preocupación" por esta trayectoria. La fuerza aérea que no se moderniza solo le espera el fracaso: "Y cuando la fuerza aérea fracasa, lo mismo ocurre con el resto del equipo", concluyó Goldfein.
"Un proceso de declive" ha sido iniciado
Anteriormente, la revista 'The National Interest' publicó que "la supremacía aérea estadounidense ha iniciado un proceso de declive a largo plazo cuyo final no se atisba". EE.UU. cuenta con una flota de aviones de combate F-15 complementada por un pequeño número de aviones F-22, recuerda el artículo. Sin embargo, el experto en defensa Peter Layton cree que los cazas F-15 son inferiores en sus características a los cazas rusos y chinos recién construidos. Layton destaca en primer lugar al ruso Su-35 que, según varios expertos, supera a los aviones de producción occidental en varios criterios. En relación a los F-22, "solo aproximadamente unos noventa [aviones] están disponibles para tareas globales de supremacía aérea", lo que, según el autor, es un número demasiado reducido para imponerse en este terreno.
Mientras tanto, los gastos militares de EE.UU. superan en mucho a todos los demás países, siendo casi cinco veces mayores que los de China, el segundo país del mundo con mayor presupuesto militar.