La inutilidad de las torturas de Guantánamo: revelan fallos en la recopilación de datos de presos

El investigador Emanuel Deutschmann hizo un análisis empírico basado en los documentos de WikiLeaks que cubren los interrogatorios y los datos de inteligencia recogidos en Guantánamo.

Emanuel Deutschmann, investigador de la Escuela Internacional de Posgrado de Bremen, publicó un análisis empírico basado en documentos de WikiLeaks que cubren los interrogatorios y los datos de inteligencia recogidos en la prisión ilegal estadounidense de Guantánamo, en la isla de Cuba, desde 2002 hasta 2009.

Según sus investigación, aunque el 85% de los detenidos en Guantánamo fueron llevados a Cuba "para proporcionar información", casi dos terceras partes no facilitaron datos sobre otros detenidos. Esto sugiere que, o bien los detenidos no tenían la información que las autoridades estadounidenses esperaban obtener o que los métodos de tortura de Estados Unidos son "ineficaces" para obtener datos de inteligencia.

A pesar de la ineficacia de las torturas, las prácticas continuaron en su totalidad, con muy poca supervisión o cuestionamiento de su eficacia debido a la falta de información pública. Esto cambió en 2010, cuando Bradley Manning filtró los informes de 765 detenidos de Guantánamo a WikiLeaks.

Casi un cuarto de los detenidos no tenía relación alguna con organizaciones terroristas conocidas, por lo que no se explica por qué fueron enviados a Guantánamo. Varios presos fueron capturados cuando huían de los bombardeos realizados por Estados Unidos en Afganistán e Irak.

En total, un 63% de los detenidos no declararon contra sí mismos ni contra otra persona a pesar de sufrir detención indefinida y tortura constante. Casi un cuarto de los torturados acusó a un pequeño número de otros detenidos de estar involucrado en una organización terrorista y un número menor acusó a todas las personas detenidas en las instalaciones, lo que se entiende como un intento de contar a los torturadores lo que estos querían oír.

EE.UU. abrió la prisión militar de Guantánamo en Cuba hace más de 14 años por la supuesta necesidad de detener e interrogar a sospechosos de terrorismo capturados durante 'la guerra contra el terrorismo' internacional liderada por Washington.