Dos destructores JS Ariake y JS Setogiri de la Marina japonesa (JMSDF, en inglés) han llegado este martes a la base naval vietnamita de Cam Ranh Bay, en el mar de la China Meridional, para sumarse a una serie de ejercicios militares, informa la agencia de noticias Kyodo precisando que las instalaciones se encuentran junto a los territorios reclamados por varios países de esta región.
"El propósito [de los ensayos] es contener a China, que está fortaleciendo su presencia militar en el mar de la China Meridional en la cercanía relativa de las Islas Xisha [Islas Paracel] y Nansha [Spratly], donde hay disputas territoriales y, de forma particular, entre Vietnam y China", continúa la agencia.
En Tokio, el ministro de Defensa japonés, Gen Nakatani, ha señalado que espera que la cooperación bilateral en materia de defensa con Vietnam siga avanzando. Asimismo, ha afirmado que Japón trabajará en conjunto con EE.UU. y otros países para reforzar las relaciones con los países ribereños del mar de China Meridional y continuar los esfuerzos encaminados a la paz y la estabilidad regionales.
Dos archipiélagos del mar de la China Meridional, las islas Paracel y las islas Spratly, son objeto de una antigua disputa territorial entre China, Filipinas, Malasia, Brunéi, Indonesia y Vietnam. Estos países aspiran a controlar ambos territorios tanto por razones económicas (se cree que albergan depósitos de petróleo y gas) como estratégicas, pues están situados en una ruta marítima muy transitada.
En septiembre de 2015, el Parlamento japonés aprobó un proyecto de ley que permite a las fuerzas militares niponas tomar parte de nuevo en operaciones militares en el extranjero en el marco de la llamada "autodefensa colectiva", es decir, en situaciones en que la amenaza no afecte directamente a Japón, sino a alguno de sus aliados.