Una mujer cristiana de 60 años ha recibido casi 30 azotes con una vara de ratán en la provincia indonesia de Aceh como pena por haber vendido alcohol. Es el primer caso en el país en que una persona no musulmana es castigada conforme a la 'sharia', la ley islámica, informa 'Daily Mail'. Junto con la mujer, una pareja fue condenada a recibir 100 latigazos por cometer adulterio.
Aceh es la única provincia de Indonesia, un país predominantemente musulmán, donde se aplica la 'sharia' y las infracciones del código islámico son penadas de manera frecuente con castigos públicos que a menudo atraen a un gran número de espectadores. La ley que permitía las sanciones físicas se aplicaba solo a los musulmanes, pero el año pasado entró en vigor un estatuto según el cual la 'sharia' puede ser puesta en acción contra no musulmanes en algunos casos.
Esta provincia del norte de la isla de Sumatra empezó a implementar la ley islámica después de obtener una autonomía especial en 2001 en el marco de las medidas del Gobierno central de Yakarta dirigidas a sofocar el conflicto separatista en la región.