Este jueves, el Gobierno de Cuba se ha pronunciado en apoyo a la presidenta Dilma Rousseff luego de conocerse la aprobación del Senado de Brasil del comienzo del proceso de 'impeachment'. En un comunicado oficial, La Habana califica la decisión de golpe de Estado "disfrazado de legalidad" y señala que se trata de un "artificio armado por sectores de la oligarquía en ese país", según informa 'Diario de Cuba'.
"Lo que ocurre en Brasil es parte de la contraofensiva reaccionaria del imperialismo y la oligarquía contra los Gobiernos revolucionarios y progresistas de América Latina y el Caribe, que amenaza la paz y la estabilidad de las naciones", subraya el comunicado.
El Gobierno de Raúl Castro asegura que el pueblo brasileño rechaza el golpe y se "opondrá a cualquier intento de desmantelar" los diversos programas sociales desarrollados durante los gobiernos de Rousseff y Luiz Inácio Lula da Silva a favor de los sectores más vulnerables de la sociedad.
Entre este miércoles y jueves se llevó a cabo la votación en el Senado brasileño que decidió el destino de la mandataria. De los 78 senadores presentes, 55 votaron a favor y 22 en contra. Ahora la presidenta será suspendida de su cargo 180 días, periodo en el cual podrá presentar su defensa ante los senadores y el Tribunal Supremo Federal.