El precandidato republicano a la presidencia de Estados Unidos Donald Trump se niega a hacer pública su declaración de impuestos en los próximos meses, como ha dejado claro en una entrevista concedida este viernes a la cadena de televisión ABC News.
El empresario ha alegado que está siendo auditado por los años fiscales del 2009 al 2014. "Cuando la auditoría termine lo publicaré —aseguró—. No tengo problemas con ello". A continuación reiteró que no tiene cuentas en bancos suizos, ni en paraísos fiscales y que su compañía es "muy, muy limpia". No obstante, su primera reacción ante una pregunta del reportero de ABC News al respecto fue: "No es de su incumbencia".
Ante la pregunta de si los votantes "tienen el derecho" a conocer qué impuestos paga antes de que tomen una decisión final, el favorito de las primarias republicanas respondió que no cree que sea un derecho. Dijo además que "la gente no va a descubrir nada" porque, en su opinión, hay pocas cosas que se puede conocer en una declaración de ingresos.
Trump no negó haber recurrido a distintas herramientas de 'optimización fiscal'. "Me esfuerzo mucho por pagar lo menos posible", afirmó, y el motivo de esta actitud es que "el país despilfarra nuestro dinero". "Toman lo que nos cobran como impuestos y lo arrojan al desagüe", explicó.
El excandidato presidencial Mitt Romney, tachado de tiburón empresarial por muchos durante su campaña electoral en 2012, ha censurado la postura de Trump. En una publicación en Facebook Romney considera que el rechazo de un candidato a que se haga pública la información tributaria merece la inhabilitación. Incluso sospecha que tras esta decisión del actual precandidato republicano se esconde "una bomba de dimensiones extraordinarias". En su opinión, no debe haber "nada que impida revelar declaraciones de impuestos que están siendo auditadas".